El 21 de mayo del presente año, Sara Daniela Coronado y Catalina Castaño Castrillón, ambas estudiantes de la Maestría en Medio Ambiente y Desarrollo se convirtieron en la nueva representación de posgrados ante el Consejo de Facultad.
Sara Daniela Coronado Majul es la representante estudiantil principal, tiene 25 años, es de Montería, Córdoba, pero lleva 7 años viviendo en Medellín, es estudiante auxiliar del Museo de Geociencias y su proyecto a desarrollar en la maestría va encaminado a una minería sostenible, enfocado en la minería de arenas de río.
Es amante a los deportes, representa a la UNAL Medellín con el equipo competitivo de fútbol femenino en la posición de portera, además hace parte del equipo formativo de waterpolo, dentro sus pasiones se encuentra el aprendizaje de nuevos idiomas, tiene dominio del inglés y del francés.
Luego de culminar la maestría, espera seguir vinculada a la academia, realizando proyectos referentes para la mejora y el desarrollo de la actividad minera; “quiero aportar desde el ejercicio de mi profesión como egresada del programa de Ingeniería de Minas y Metalurgia para el desarrollo sostenible de los territorios”.
Catalina Castaño Castrillón, es la representante estudiantil suplente, tiene 38 años, le encanta leer historias, novelas, crónicas, hacer trekking, viajar, también disfruta la vida en el campo, el café, pero, sobre todo, si es recién molido.
El componente principal en el cual se ha desempeñado a nivel profesional tiene que ver con la investigación en seguridad hídrica, actualmente trabaja para el Área Metropolitana del Valle de Aburrá, en el componente de Autoridad Ambiental, en el equipo de Gestión del Recurso Hídrico.
“Hacer la maestría en este momento de mi vida me supone un gran reto, pues llevo muchos años de experiencia laboral y volver a la academia no ha sido fácil; sin embargo, quiero disfrutarme este momento, aprovechar los espacios y beneficios que ofrece la Facultad de Minas y la UNAL Medellín y seguir en la búsqueda de retos y oportunidades laborales”.
Respecto a los desafíos, Castaño Castrillón expresó que, “con la coyuntura actual de la universidad, uno de los retos más grandes es tener una cercanía con los estudiantes de posgrado, mejorar las formas y medios de comunicación para conocer las necesidades y solicitudes de la comunidad y así, representarlos de la mejor manera posible”.
Al respecto, Coronado Majul, expresó que, la representación estudiantil de posgrado es una oportunidad para tener voz en las decisiones que impactan la experiencia educativa. “Si bien el tiempo y las responsabilidades profesionales que solemos tener a nivel de posgrado pueden ser un obstáculo, consideramos que es fundamental que los estudiantes de posgrado seamos escuchados y participemos activamente en la construcción de un mejor futuro para nuestros programas y la Facultad. Nuestra intención es que las voces de los estudiantes de posgrado sean escuchadas y tenidas en cuenta en la construcción de Universidad”.