Escudo de la República de Colombia

Aunque Colombia históricamente le ha dedicado a las carreteras alrededor del 80% del presupuesto total destinado para transporte, esta inversión no ha sido suficiente para solucionar el problema de movilidad vial en el país.

 

Para Víctor Gabriel Valencia Alaix, profesor del Departamento de Ingeniería Civil de la Facultad de Minas de la Universidad Nacional Sede Medellín, esto se debe a múltiples factores entre los que se cuentan la poca preocupación o interés por tener una infraestructura vial de calidad, la falta de interés político y de dinero. Por lo que actualmente menos del 1% de las carreteras en Colombia son “modernas” o de doble calzada.

Valencia Alaix señala que Colombia se ha preocupado mucho por tener carreteras que sean económicas en la construcción pero sin tener una visión a largo plazo; de que si se invirtiera en vías de calidad, a pesar de que el costo inicial sea muy grande, se verá compensada por los beneficios durante la vida útil de la carretera.

“Si se involucran valores tan importantes como el de la vida, las implicaciones de accidentes en las carreteras es muy alta, y eso daría para que un gobierno invierta todo lo necesario en las carreteras, porque sabe que con eso contribuye bastante para tener mejores condiciones para la seguridad vial”. 

Y agrega que si existieran carreteras muy buenas requerirían costos de mantenimiento y de operación de los vehículos bajos, lo que se reflejaría en los costos de transporte y por lo tanto de los productos de consumo.

El 50% de las personas que se movilizan diariamente en Medellín y los municipios aledaños utilizan el transporte público, de las cuales el 29% hacen uso de buses y microbuses, según la encuesta Origen y Destino 2012 realizada por el Área Metropolitana del Valle de Aburrá. Teniendo en cuenta este panorama, el profesor Víctor Gabriel opina que las soluciones se deben trazar de manera integral para mejorar el sistema de transporte: “se está invirtiendo mucho en ciclorrutas pero se está descuidando el transporte público en buses, mejorar ese sistema de transporte tiene que ver no solo en la infraestructura vial sino en cómo las empresas están prestando el servicio”.

Respecto al Puente Gilberto Echeverri Mejía, más conocido como el de la 4 sur, comenta que no ha atendido adecuadamente el problema de movilidad en el sector de El Poblado, “cuando los vehículos circulan y llegan al final se encuentran con una congestión debido a que no hay continuidad en la capacidad de las vías. En vez de resolver el problema lo que hizo fue trasladarlo”. Y añade que se han adelantado estudios sobre el Puente de la Madre Laura, que actualmente está en construcción, y el panorama no dista mucho.

“Podría servir mucho más si se mejora la movilidad en todos los sentidos aquí en la ciudad, y eso no quiere decir construir vías -aunque sí se necesitan-, eso quiere decir mejorar los sistemas de control, las formas de prestar el servicio, las rutas, quienes prestan los servicios de transporte… y con seguridad que ese beneficio sería mucho más alto y con menos dinero del que se está invirtiendo en infraestructura”, concluye.

 

 

 

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